La computación científica es un campo que ha tenido una alta relevancia en el pasado y que sigue siendo, en la actualidad, un motor importante en el desarrollo de la informática. Es un área que se basa fundamentalmente en la construcción y desarrollo de modelos matemáticos y técnicas numéricas para la resolución de problemas de gran complejidad en diferentes campos (problemas de ingeniería, biología, genómica, estructuras de materiales, científicos, etc.).
Uno de los motivos del auge de este campo es el avance en las prestaciones y potencia de los recursos computacionales (ambas han experimentado un notable incremento en los últimos años). Por tanto, el uso de las infraestructuras de computación para resolver problemas científicos a gran escala ha permitido acelerar las investigaciones hasta límites inimaginables, llegando incluso a obtener resultados en tiempo real. Este hecho dota, también, a los científicos de nuevas líneas y campos de investigación con los que antes no se contaban.
El CETA-Ciemat es un centro muy ligado a la computación científica, no sólo por la gran diversidad de recursos computacionales que tiene (tanto de altas prestaciones como de computación distribuida), sino también por la labor de investigación y soporte que realiza en la misma.
Son destacables los proyectos de paralelización y adaptación de códigos científicos complejos que el centro lleva a cabo, en los cuales el principal objetivo es obtener los resultados en el menor tiempo posible.
Además, el centro desarrolla líneas de investigación centradas en optimizar el uso de sus infraestructuras, permitiendo aprovechar al máximo los recursos con los que se cuenta y proporcionar servicios de mayor calidad a los investigadores.
Líneas de trabajo relacionadas:
- Adaptación de aplicaciones a entornos HTC/HPC/cloud
- Modelización de aplicaciones auto-adaptativas para entornos de computación distribuida
- Modelización de sistemas de computación distribuida a través de procesos estocásticos