A mediados de diciembre tuvo lugar en Pamplona, el seminario final del proyecto LIFE+ RESPIRA, en el edificio de la Biblioteca de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Navarra. Este seminario contó con investigadores del CIEMAT y de otras instituciones participantes en el proyecto, con representantes de otros proyectos europeos, y con representantes institucionales. En dicho seminario se presentaron los resultados más relevantes del proyecto, algunos de ellos fruto del trabajo realizado por investigadores del CIEMAT en el campo del papel de la vegetación urbana en la calidad del aire, de la simulaciones de alta resolución de la dispersión de contaminantes en Pamplona, del impacto de medidas de mejora de la calidad del aire en esa ciudad y de las estimaciones de los impactos en salud y su valoración económica, así como la percepción de la calidad del aire por parte de la población local. En la segunda edición de los Premios SER Navarra, para conmemorar los 85 años de Radio Pamplona, el proyecto LIFE+ RESPIRA fue distinguido con el Premio Medio Ambiente de Navarra. La entrega de los galardones se realizó el pasado 31 de enero en el Museo Universidad de Navarra.
El proyecto está liderado por la Universidad de Navarra y su objetivo principal es demostrar que es posible reducir la exposición de los ciclistas y peatones a los contaminantes atmosféricos urbanos, aplicando nuevas tecnologías y otras medidas relacionadas con la planificación urbanística, el diseño urbano, el empleo de vegetación y la gestión de la movilidad. Además de la Universidad de Navarra y CIEMAT, participan GANASA (Gestión Ambiental de Navarra S.A.) y Pavimentos Tudela S.L. También cuenta con la colaboración de otras instituciones y organizaciones como el Ayuntamiento de Pamplona, la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona, la Asociación de Medios de Transporte Saludables y la empresa de eco-mensajería Oraintxe, entre otras.
La contribución de la Unidad de Modelización y Ecotoxicología de la Contaminación Atmosférica y del Centro de Investigación Socio-Técnica (CISOT-CIEMAT) del Departamento de Medio Ambiente y de la Unidad de Análisis de Sistemas Energéticos del Departamento de Energía, ha sido clave para el éxito del proyecto. Entre las contribuciones más relevantes del CIEMAT destaca las medidas experimentales del efecto de la presencia de vegetación en zonas sin fuentes de emisión, como son los parques, jardines y bosques peri-urbanos, la medida de la eficacia del uso de barreras vegetales en la dispersión de los contaminantes el efecto de la presencia de arbolado viario en calles estrechas con efecto cañón, las simulaciones con modelos CFD de alta resolución tanto a escala de barrio o distrito como a escala de toda la ciudad (primera ciudad en España y de las pocas del mundo en las que se ha conseguido) para caracterizar cómo se distribuyen los contaminantes en la ciudad y en sus calles y plazas, así como para investigar la eficacia de distintas medidas posibles (incluidas las barreras vegetales) para reducir la contaminación incluyendo la estimación de impactos en salud y costes económicos asociados y el estudio de la percepción de la calidad del aire por parte de la población local. [Noticia de junio de 2017 al respecto].
La vegetación urbana constituye una herramienta importante en la gestión de la calidad del aire pero su eficacia dependerá de las características de las especies seleccionadas, fundamentalmente dependiendo del tamaño de la copa, la longevidad de las hojas, la superficie foliar rugosa o con pelos, las altas tasas de intercambio gaseoso, el grado de alergenicidad del polen que producen y la emisión de compuestos orgánicos volátiles. A estos factores hay que añadir la importancia de una gestión adecuada de la vegetación que asegure la vitalidad y el buen estado de salud de las plantas, así como un apropiado diseño y configuración de los tipos de zonas verdes y uso de barreras vegetales que permitan ayudar a disminuir la exposición de la población a la contaminación atmosférica. Por ejemplo, en calles estrechas con tráfico intenso se necesitan estudios detallados para diseñar una distribución de la vegetación que ofrezca confort climático sin empeorar la calidad del aire al disminuir la ventilación y la capacidad de dispersar los contaminantes emitidos por los coches.
Las simulaciones con los modelos CFD muestran la gran variabilidad espacial de la concentración de contaminantes dentro de las calles dando una visión de muy alta resolución de la contaminación en la ciudad. Una de las grandes novedades de este estudio es que por primera vez en España, y casi en el mundo, se ha podido utilizar modelos CFD de muy alta resolución para simular la contaminación en una ciudad completa de tamaño medio como Pamplona, lo que ha supuesto un esfuerzo computacional enorme que ha podido llevarse a cabo gracias a los superordenadores del Centro Extremeño de Tecnologías Avanzadas (CETA-CIEMAT). Esto ha servido para detectar qué calles son las más contaminadas y a qué horas se produce más contaminación.
Estos modelos se han utilizado para investigar el efecto de distintas medidas para reducir la contaminación atmosférica en la ciudad (restricciones de tráfico en algunas calles o efecto de pavimentos fotocatalíticos) o, al menos, reducir la exposición de la población a la contaminación (vegetación urbana o barreras vegetales). Las restricciones de tráfico en ciertas calles de un barrio de Pamplona (Plaza de la Cruz) mediante la peatonalización de las mismas y redistribución del tráfico a otras avenidas es una opción muy eficaz para reducir la contaminación en esas calles, pero puede aumentarla en las circundantes, si el tráfico se desvía hacia ellas. Por el contrario, la instalación de pavimentos fotocatalíticos en las aceras de ese barrio reduce muy poco la concentración de NOx a la altura de respiración de los peatones. En cuanto al efecto de poner árboles en calles estrechas con tráfico (del tipo street canyon en su denominación en inglés), se ha visto que los cambios en la concentración afectarían también a calles aledañas, pudiendo aumentar la concentración de forma significativa, mientras que la eficacia de las barreras vegetales como los setos dependerá de factores importantes como la altura de los setos. En resumen, antes de implantar arbolado o setos en calles estrechas con tráfico hay que analizar con simulaciones qué configuración puede ser más eficaz. No obstante, la estrategia más efectiva es reducir el tráfico de vehículos a motor en las calles de la ciudad que son la principal causa de sus problemas de contaminación atmosférica.
Los estudios de valoración económica de los impactos ocasionados por la contaminación atmosférica han permitido cuantificar los impactos en la población de las emisiones de NO2 por el tráfico rodado y cómo la aplicación de medidas de mejora puede reducir dichos impactos. Se ha estimado que alrededor del 7% de la población en la ciudad de Pamplona estuvo expuesta en el año 2015 a niveles de contaminación de NO2 por encima de los niveles máximos de 40 µg/m3 recomendados tanto por la Unión Europa, como por la OMS. Esto ocasionó impactos sobre la salud importantes cuantificados entre 1,57 millones de euros y 5,75 millones de euros. Los resultados obtenidos del análisis de las medidas de reducción o mitigación de la contaminación muestran que medidas como las planteadas de restricción del tráfico en ciertas calles pueden llegar a reducir los impactos en la población hasta un 58%, frente a un 2% de reducción en el caso del uso de pavimentos fotocatalíticos. La metodología utilizada en este proyecto permite determinar a priorí qué medidas pueden ser más eficaces para mejorar la calidad del aire en una ciudad.
La participación del CISOT en el proyecto ha consistido en el análisis de la percepción que tienen los residentes en Pamplona sobre la contaminación atmosférica en su ciudad. Se han estudiado sus creencias sobre el riesgo que comporta para su salud, el uso que hacen de la información sobre calidad del aire o la prevalencia de ciertas conductas de reducción de la contaminación y protección frente al riesgo. Los resultados indican que, en general, los participantes de Pamplona consideran que la calidad del aire en los barrios donde residen y trabajan es buena. A pesar de que los ciudadanos de Pamplona perciben el riesgo en la salud derivado de la contaminación del aire, en general no muestran emociones negativas relacionadas ni realizan conductas para protegerse de o para reducir la contaminación. En cuanto a las conductas de información, los participantes de Pamplona han reportado unos niveles bajos de información y una baja implicación en los contenidos sobre calidad del aire. Conocer las reacciones de los individuos ante los riesgos derivados de la contaminación atmosférica urbana constituye una pieza esencial para la gestión de la calidad del aire en nuestras ciudades.
Según detalló la emisora en su nota de prensa, el premio 2018 en la categoría de Medio Ambiente ha reconocido a LIFE Respira "por su demostración de que circular en bicicleta por la calzada incrementa hasta un 40% la contaminación recibida y llega a suponer unos 120 ingresos hospitalarios al año", tal y como hicieron público sus responsables en la presentación de los resultados del estudio, el pasado mes de diciembre.
Los resultados del proyecto se pueden leer en este enlace: Informe de Resultados.
Enlace a la noticia de 2015.
Figuras
- Figura 1. Muestreo de la influencia de los setos en la calidad del aire en Pamplona proyecto Life+ Respira.
- Figura 2. Mapas horarios de alta resolución de la concentración promedio anual de NOx durante 2016: 8 a.m., 2 p.m., 8 p.m., todos ellos hora local.
- Figura 3. Efectos sobre la salud debidos a la exposición a NO2.
- Figura 4. Evaluación subjetiva de la calidad del aire por parte de los residentes en pamplona (N=242).
- Figura 5. Jesús Miguel Santamaría recogiendo el premio. Créditos: Universidad de Navarra
Fuente: CIEMAT